Arboricultura en el proyecto LIFE de Aranjuez

Por Pilar Sánchez, bióloga; Fundación Aranjuez Natural; José Juan Villagrán, ingeniero técnico agrícola; director de J.J. Villagrán Arboricultura.
Nuestro agradecimiento al Comité de Asuntos Hispanos de la ISA por las gestiones realizadas para editar este artículo.

Aranjuez es una pequeña ciudad al sur de Madrid, España. Su elección como sitio real se debió a la riqueza natural de esta vega, donde confluyen los ríos Tajo y Jarama. De hecho, la abundancia de fauna cinegética en estos parajes fue lo que más atrajo a la monarquía. Este lugar, elegido como cazadero real en tiempos de Carlos I, pronto se transformó en espacios de huertas. Durante los reinados de Felipe II, Carlos III y monarcas sucesivos, se roturaron los sotos que rodeaban a los ríos para desarrollar una agricultura de vega. De esa época datan los primeros trazados de lo que hoy se conoce como los Paseos Históricos. Estos magníficos caminos arbolados tenían como función unir las huertas y los jardines reales.

Hoy los Paseos Históricos no sirven de conexión entre el campo y la ciudad. Existe un progresivo distanciamiento de la población con el entorno natural de Aranjuez debido en gran parte a su deterioro por la falta de cuidado y mantenimiento. Aún así, los Paseos conservan sus estructuras básicas y lo que es más importante, sus árboles.

En noviembre de 1996, el Ayuntamiento de Aranjuez presentó a la Dirección General de Medio Ambiente de la Comisión Europea la propuesta ``Recuperación del Medio Ambiente Urbano y la Diversidad Biológica de Aranjuez'', que fue financiada por medio de los fondos LIFE. La revitalización de los Paseos Históricos para diversos usos es una de las acciones prioritarias del proyecto.

Aún estamos a tiempo de conservar los árboles de los Paseos como símbolos de que es posible la integración y convivencia del medio natural y el urbano. Con este objetivo se está trabajando en un proyecto piloto en la Calle de la Reina, una de zonas las más emblemáticas de Aranjuez Esta calle constituye la unión entre los Jardines del Príncipe y el núcleo urbano. La doble alineación de plátanos (Platanus spp.) centenarios a ambos lados sirve de antesala a los Jardines. Entre ellos se pueden encontrar muchísimos ejemplares que, aislados, se considerarían como de enorme valor. Para proteger la calle, única desde el punto de vista paisajístico y botánico, se han adoptado una serie de medidas que pretenden ser un punto de inflexión en su actual estado de deterioro y abandono. La dimensión del proyecto, cerca de 700 plátanos con alturas entre los 30 y 40 metros (90 y 120 pies), y la utilización de métodos y técnicas muy sofisticados, hacen de este trabajo de arboricultura el más interesante de los realizados hasta la fecha en España. Los pasos que se han seguido o seguirán para las mejoras del arbolado se describen a continuación.

Diagnóstico: Es necesario conocer muy bien el estado de cada uno de los árboles para poder trabajar en ellos. El estudio comienza con la recogida de datos relativos a su estado biológico y al entorno en el que se encuentran. La gran transitabilidad de esa calle hace que sea vital el conocimiento de la estructura mecánica de los árboles. Esto permite valorar su peligrosidad, siendo ello uno de los objetivos prioritarios del proyecto. Se ha usado el método Análisis Visual del Árbol (V.T.A., siglas en inglés), que permite emitir un juicio de la gravedad de los defectos, basándose en los conocimientos científicos que se poseen de la biomecánica del árbol. El V.T.A. relaciona funcionalmente algunas alteraciones estructurales internas, no visibles, con específicas manifestaciones externas. El reconocimiento de los síntomas y la sospecha de presencia de eventuales defectos en el interior, constituyen el primer paso para un análisis más profundo. El uso por un especialista de los instrumentos de diagnóstico adecuados, aporta datos objetivos, posibles de repetir y de documentar. Esto aproxima los estudios sobre la estabilidad arbórea al campo científico.

Los instrumentos que se han usado en este estudio son:
Resistógrafo M300: Con una broca de 3 mm y una profundidad de exploración de 30 cm se realiza una perforación en la estructura leñosa del árbol. Los resultados se evalúan en una gráfica del perfil de la sección examinada, lo que permite conocer con precisión las variaciones en la consistencia del leño.

Arborsonic: Emite una onda ultrasónica que atraviesa el interior del árbol. El tiempo de transmisión permite conocer si hay una cavidad o área degradada. Se pueden detectar incluso estados muy iniciales de pudrición.

Fractómetro: Mide el ángulo y resistencia a la rotura de una muestra de leño extraída del interior del árbol con una barrena de Pressler. Permite conocer la calidad mecánica de la madera y por tanto es indispensable para emitir un juicio sobre la estabilidad del árbol.

Poda: Las mejoras del estado de los árboles de la Calle de la Reina tenían como objetivos principales la reducción de riesgos y la eliminación de árboles con nula actividad biológica. Para realizar estos trabajos se contó con un equipo de podadores de Italia y España, especializados en la técnica de trepa. La trepa le permite al podador desplazarse a cualquier lugar del árbol y trabajar sólo donde se requiere poda. Además, es lo más apropiado al tratarse de árboles de gran tamaño e importancia. Para subir a las copas más altas los podadores usaron dos plataformas de 28 metros (84 pies) de altura. La disposición del arbolado permitió la colocación correcta de la plataforma, en el centro de la calzada para evitar incrementar el grado de compactación del terreno.

La poda consistió en su mayoría en la eliminación de ramas secas. En los casos de gran defecto estructural se aclareó la copa para reducir su resistencia al viento. Muchos de los ejemplares presentan viejos cortes de desmoches de grandes dimensiones en los cuales ha crecido una profusión de chupones. En esos casos se controlaron esos puntos, reduciendo y seleccionando los chupones para mejorar la estabilidad y evitar su rotura. En los ejemplares de gran riesgo a la fractura y capaces de causar daño, y en los considerados muertos o decrépitos sin posibilidad de reformación, se procedió a la tala. Muchas de las talas y podas se realizaron con gran dificultad debido a la presencia de árboles colindantes, la proximidad de la verja del Jardín del Príncipe, o la situación de farolas. Estos trabajos tuvieron que hacerse mediante descenso controlado usando tirolinas u otros métodos que, con la ayuda de cuerdas y poleas, permitieron actuar sin provocar daño alguno. Por último, se procedió a la eliminación de tocones para no afectar la estética y permitir una nueva plantación en el mismo lugar.

Nuevas plantaciones: Si se quiere conservar el valor paisajístico de la Calle de la Reina Calle, debemos asegurar la continuidad de su arbolado. Muchos de esos árboles se encuentran en la última fase de su ciclo vital. Por tanto hay que pensar en el relevo generacional. Para ello se plantarán nuevos plátanos en los espacios disponibles.

Plan de mantenimiento: Varias medidas se han tomado y tomarán para garantizar el continuo bienestar del arbolado. La recuperación de la antigua acequia que regaba estos árboles está planteada en el proyecto. Así se evitará la falta de agua en especial durante los meses estivales. Se planea el control anual supervisando los ejemplares de estabilidad comprometida y recomendando el tipo de poda necesaria. Se incluye el control y prevención de obras que afecten el sitema radicular, la limpieza y desbroce de la acequia y reposición de árboles.

Estudios complementarios: El estudio de los árboles de la Calle de la Reina se complementará mediante dos proyectos concernientes a su sistema radicular y a las pudriciones causadas por hongos. Se presentarán informes sobre las condiciones del sistema radicular y su suelo, los daños causados a las raíces y los producidos por éstas a las infraestructuras colindantes. Se redactará un plan de mejora y conservación del sistema radicular y un pliego de condiciones técnicas para la realización de obras en las proximidades del arbolado. Con la finalidad de conocer cómo las pudriciones de la madera afectan a la estabilidad del árbol, se hará un estudio sobre éstas y la relación patógeno-árbol para conocer mejor la dinámica de estas infecciones, evitarlas en lo posible y efectuar un mejor diagnóstico.

Conclusiones
Sobre el diagnóstico:
• El diagnóstico visual de la estructura debe ser realizado en toda la extensión del árbol, usando para ello plataforma o la colaboración de un trepador.
• Se considera más importante el conocimiento de la relación entre árbol y hongo causante de pudriciones, que la dimensión del defecto presente.

Sobre la poda:
• En paseos arbolados, el sistema más efectivo es la combinación de plataformas elevadoras con trepadores.
• El personal debe estar altamente cualificado para ejecutar la poda y a su vez detectar y evaluar los defectos presentes en la copa.

Sobre el mantenimiento:
• Estos tipos de tratamientos no deben considerarse extraordinarios, deberán ser incluidos dentro de un programa de conservación.
• Un plan de gestión será implementado, usando como herramienta un programa de computadora que permita el manejo fácil de la información. Para la localización exacta del árbol, además de la planimetría digitalizada, se usa un sistema de inserción de una microficha en el árbol.

Futuro del proyecto:
La Fundación Aranjuez Natural maneja los fondos del programa LIFE. Las principales instituciones sociales y económicas de la cuidad están representadas en esta organización ambiental. Esto garantizará la continuidad del proyecto.

Editado por Iris Magaly Zayas, USDA Forest Service
Revisado por Manuel J. Jordán, Texas Forest Service y
Alfonso Tovar, Ph.D. , UNAM, Monterrey, México